
Al entrar a este nuevo mundo del H, pasamos por varias fases que podríamos ver similares a las del duelo; La negación, la ira, depresión, aceptación… A algunos les cuesta más, a otros menos tiempo llegar a la fase final en la que poco a poco vamos comprendiendo que no es la gran cosa, que la condición se reduce a nada más que un inconveniente físico que se puede presentar cada tanto, que es manejable, y por fin llega la calma y comenzamos a aprender a vivir con nuestro nuevo inquilino. Pero luego llega una nueva fase que se queda ahí como un mensaje recurrente en la mente, que es la de la “Revelación”. Llega éste punto en el que piensas en cómo será el momento en el que decidas contar a alguien que sea importante para ti y que consideres que debe saber sobre tu condición. Seguro que de pensar en esto muchas veces te pones ansioso, te da miedo, vergüenza, tu mente vuela y… No! calma. Vamos a hablar sobre esto y vamos a prepararnos en este momento a llamar a todas las energías positivas que encontremos y enfocarnos en la PERSPECTIVA.
Para todo lo que nos sucede en la vida, tenemos una reacción que depende de la perspectiva con la que decidamos enfocar el problema, según esa perspectiva es que tomamos una actitud con la cual lo enfrentamos, y seguidamente en base a ambas cosas, es que tomamos decisiones.
Por ejemplo:
- Te echan del trabajo
– Perspectiva Negativa – Actitud Negativa:
“¡Noo, porqué a mi! con tantas deudas qué pagar y me pasa esto. ¡Ah! Todo va mal y ahora cuánto tardaré en encontrar un nuevo trabajo, esto tiende a ponerse peor ¡Qué mal estoy!”.
– Perspectiva Positiva – Actitud Positiva:
“Bueno, ésto no me lo esperaba; pero es una buena oportunidad para crecer y encontrar un nuevo proyecto que me permita alcanzar mis objetivos y realizar mis sueños, ¡Estaré bien!”.
Si bien ambas personas tienen un mismo objetivo, que es el de encontrar un nuevo trabajo; la persona con la perspectiva negativa, al ver todo tan complicado y desesperante, lo hará con mucha presión dentro de un clima turbulento y enfermizo, que muy probablemente ralenticen el proceso y lo estimulen a aceptar lo que “pueda” encontrar, aunque aquello no contribuya en su realización personal y su felicidad. A diferencia de la persona con perspectiva positiva, que ve el problema como una oportunidad de hacer algo mucho mejor y que lo acerque más a alcanzar sus metas y bienestar emocional dentro de un clima motivador.
Ahora bien, lo que te interesa:
- Contarle a alguien que tienes herpes
– Perspectiva Negativa – Actitud Negativa:
“Tengo tanto miedo de ser rechazad@. Quisiera huir de esto y esconderme. ¿Cómo voy a ponerme a mí mism@ en esta posición de salir herid@? Me va a juzgar, me va a ver como alguien suci@, repugnante. Lo que tengo es algo horrible, nadie me va a querer. Si lo confiezo y me rechaza, no lo soportaré. Me quedaré sol@, Siempre”.
– Perspectiva Positiva – Actitud Positiva:
“Bueno, ésta relación está avanzando bien y quiero contarle y que sepa que tengo herpes. Lo hago porque me importa y porque es lo correcto, porque decirle también demuestra la clase de persona que soy. Quiero decírselo porque mi integridad así lo demanda. Ésta relación tiene mucho potencial y podemos hacerla crecer con mucha más confianza, honestidad y complicidad en un nivel muy superior. Incluso si en ésta oportunidad mi herpes es rechazado, estaré bien porque lo que soy es mucho más importante que lo que tengo”.
En este caso, ambas personas tienen como objetivo la aceptación, la cual depende de otra persona. La persona con la perspectiva negativa, probablemente trasmita esa misma energía a la otra persona porque él mismo se ve de una forma desagradable, y una respuesta negativa lo llevaría a decidir autocompadecerse y pasar una vida en soledad priorizando la vergüenza que siente por sí mismo, pues según su pensamiento, nadie aceptaría tal cosa (Él mismo no se acepta). Mientras que la persona con perspectiva positiva tiene claro que proceder de ésta forma es lo correcto, y ya sea que se logre el objetivo o no, no tendrá nada que ver con él como persona, pues es consiente de lo que vale y lo que tiene por ofrecer.
Ahora bien, hay otros factores que son importantes al momento de revelarnos con alguien. Uno de ellos es el ambiente que crees para hablar; y el otro factor, y muy importante al comunicar algo, no es el “qué” digas, sino el “cómo” lo digas.
Cuando hablo de “ambiente”, volviendo un poco al ejemplo anterior, si vuelves a leer el párrafo sobre la perspectiva negativa, ¿Cómo te sientes mientras lo lees? ¿quizá sientes frío, temor, rabia.. rechazo? ¿Te sientes seguro mientras lees este párrafo? ¿Te hace sentir dispuesto a mostrarte sincero, vulnerable y abierto ante la persona a la que le piensas revelarte, para hablar del tema? Me parece que no. Ahora, vuelve a leer el párrafo sobre la perspectiva positiva, ¿Qué sientes al leer éste párrafo? Se siente más cálido, ¿cierto? Se siente uno más dispuesto a abrirse sin prejuicios, porque provee un ambiente de intimidad, honestidad, vulnerabilidad y confianza; como un sentimiento que dice “Todo está bien”. De ahí, de la actitud que tu perspectiva te dé, es que se desliga el poder de crear un ambiente, un espacio para estar en relación con la otra persona y con lo que sea que quieras mostrarle desde el corazón, y que lo que sea que le muestres, sea apreciado. Ahora, al hablar del “cómo” comunicar adecuadamente algo, me refiero a que la elección de palabras que usemos son de gran importancia. Por poner un ejemplo, El H1 es categorizado como una condición común en la piel, mientras que el H2 es considerado una ETS. Ambos virus producen los mismos síntomas, la única diferencia es que el H1 por lo general suele salir en la mitad superior del cuerpo, mientras que el H2 en la parte inferior, comúnmente genitales. Entonces, ¿Cómo tú categorizas el herpes en ti? ¿Cómo una simple condición en la piel o como una “enfermedad incurable”? ¿Cuál es el impacto que tienen éstas etiquetas sobre ti?. Ahora, si bien las palabras que elijas son muy importantes, la forma en cómo tú te sientas sobre el herpes o las cosas que tú creas de él, van a ser también comunicadas de alguna forma en la conversación. Entonces, si sostienes la creencia de que estás bien (y lo estás, ¿cierto?), y que esto es solo una inconveniencia física menor (que lo es, ¿verdad?) entonces ya tienes el tono de la conversación. Porque, vamos a ser sinceros, no es cómo te sientes sobre el herpes, es cómo te sientes sobre ti mismo. Deben haber 1000 maneras diferentes de decir “tengo herpes”, y cada forma carga un mensaje diferente sobre quién eres… ¿Qué mensaje quieres enviar?
Ahora seguimos con la conversación en sí. Inicia con algo sencillo, sin dar mucho rodeo al asunto, algo como “Tengo algo importante qué hablar contigo”, es una frase sencilla, y dices que es importante porque la relación es importante. La confianza y la honestidad son importantes. Ahora que tienes su atención, empieza a hablar desde el corazón, no desde tu vergüenza. Enfócate en lo que sientes por la persona que tienes en frente, la conexión que hay entre ustedes dos es tu fuerte, y no la negativa posibilidad del rechazo.
Las palabras que uses dependen mucho de tu relación y conexión con la persona con la que te estás revelando y de tu personalidad. Sin embargo, te pongo 2 ejemplos sencillos de cómo sería una conversación negativa y una positiva:
- Conversación Negativa: “He venido sufriendo esta terrible enfermedad y me siento culpable de no contarte. …Tengo… herpes…”
- Conversación Positiva: “Me siento muy feliz y conectad@ contigo, y debo comentarte algo para continuar a dónde sea que ésta relación esté yendo… Tengo herpes. ¿Qué piensas?”
Mientras leías la conversación negativa, te sentiste incómodo, ¿cierto? Una persona que cuenta que tiene una “terrible enfermedad”, te lleva a sentir lástima por ella y en imaginar lo mal que lo debe estar pasando porque es evidente que sufre mucho y que lo que carga debe ser simplemente terrible. La segunda persona, se ve contenta. Al parecer tiene un problema, pero seguro no es tan malo. Se le ve bien, se le siente bien.
Evidentemente, después de haberte escuchado, la otra persona hará preguntas, para lo que es conveniente que estés bien informado con los datos REALES sobre el H. Puedes encontrar algunos temas aquí mismo en el blog que podrían ser de ayuda:
Lo que viene después de haber ya hecho tu parte, depende de la otra persona y su mundo; y sobre esto no tienes control. Así que relájate, que lo que es para uno, simplemente ES.
Por otro lado, debes tener en cuenta que la persona que tú mereces contigo, es aquella que se encuentre ahí en las buenas y malas. Una condición en la piel como ésta no es ni la mínima parte de la cantidad de obstáculos que una pareja debe afrontar a lo largo de la vida, y si afinas la perspectiva en éste tema, hasta el herpes te puede ser de ayuda para filtrar posibles casos de malas elecciones, ¿Qué tal?, Mejor intentarlo con alguien que desde el comienzo vio lo valioso que eres tú como persona, a una simple atracción superficial, ¿Verdad? Si luego las cosas no se dan, será como en los casos de parejas “comunes”, debido a otros factores que no tengan que ver con el H. Porque de ahí viene otro tema y es que, no debes sentirte atrapad@ a una persona que no amas solo porque aceptó tu condición. Si la relación no funciona, o peor aún, no te tratan de la forma que mereces, no dudes en terminarla e ir por lo que en verdad es para ti.
Eres una persona muy valiosa con mucho qué ofrecer, no permitas que nada ni nadie te haga pensar lo contrario 🙂
HOLA hace un mes me detectaron herpes genital, me siento muy mal con ganas de morir, necesito ayuda!
Hola Ceci,es un poco difícil al inicio aceptarlo, pero es como toda enfermedad hay que tener cuidado cuando salen las ampollas, pero luego tu vida continua de manera normal. Trata en lo posible de no tomar pastillas la verdad, y mas bien trata en esos días de consumir AJO (lo cortas en dos mitades y lo tomas con agua) y luego te lavas bien los dientes, consume l-lisina 500 mg ( Ya deje de consumirlo), y para las llagas usa aceite de coco en un par de días se sanan. No todo es malo la vida continua hay que seguir adelante. Saludos
Hola Ceci, no pienses en esas cosas para nada. ¿morir por una afección a la piel? ¿no te suena a locura? Hay muchísimas personas luchando por sobrevivir cada día que ya quisieran poder tener solo un bobo hérpes.. Sé que a uno le da duro al comienzo, pero esto no es nada. Se puede hacer una vida normal. Hay que agradecer que es esto y no tantas otras cosas mucho peores que en verdad afectan la vida.
Mucho ánimo Ceci, le mando un abrazo.
En verdad que ha sido muy difícil, tengo miedo a contagiar a toda la gente, de que se enamoren de mi y no poder tener una vida sexual “normal” cómo antes 😖
Hola, alguien para hablar, acabo de recibir la noticia… y quisiera conversar con alguien.
Hola Alex 🙂 Solo envíame un correo a: ispubar@diarioherpersonal.com con tu número de whatsapp, y un admin de DHP y se comunicará contigo para ingresarte al grupo de apoyo 🙂 Allí somos muchos con la misma condición y todos con muchas ganas de ayudar.
Yo tambien quisiera morir, porque me pasan estas cosas a mi. Tengo herpes genital.
Hola Cor, esto no es algo tan grave como para decir que quieres morir.. No digas eso jamás, ahora estas así porque esto es nuevo y no sabes nada al respecto más que el estigma, pero más adelante te darás cuenta lo común que es, que se puede hacer una vida normal y que algún día quisiste morir por algo muy comparable a una gripe. En verdad no tiene sentido. Es tu mente jugándote la mala ahora, solo tú puedes decidir salir de eso y empezar a verlo con otra perspectiva.
Hola q se sabe sobre la cura d herp q martirioo esto para cuando habra una solucion dios mio
No es facil ceci, y mas cuando siempre has sido alguien tan sano, enserio no quiero seguir viviendo.
Hola, fui detectada hace menos de 2 meses con HG.
y pues gracias a un bajón emocional llegue a este blog que de verdad me ha ayudado mucho, quisiera poder conversar con personas que atravisan lo mismo que yo, envie un correo a la direccon de correo indicado.
Slds.